La cortesía es un aspecto muy importante del comportamiento social en la República Dominicana. Para empezar la conversación, siempre hay que saludar (basta con un sencillo “Buenos días” o “Buenas tardes”) y sonreír, que será respondido por algo parecido por el interlocutor, creando un ambiente agradable. También hay que prestar atención al aspecto. Los dominicanos en general se preocupan mucho por su apariencia y vestuario.
Los habitantes de República Dominicana son en su mayoría simpáticos, extrovertidos y están deseosos de ofrecer ayuda y hospitalidad. Muchos comparten un sentimiento de orgullo nacionalidad y la amabilidad es una forma de demostrar a los turistas extranjeros que la República Dominicana es un lugar refinado y educado.
En los edificios estatales y las iglesias están prohibidos los pantalones cortos, las camisetas de tirantes y los sombreros. Si van de excursión a Santo Domingo no lleven este tipo de prendas ya que probablemente les prohiban la entrada en lugares como la catedral.
Algunos consejos para el trato con los dominicanos son los siguientes:
- Dejar propina en los restaurantes de al menos un 10% del gasto que hizo.
- Aceptar el café o el agua que se le ofrezca, sobre todo cuando se está en casa de alguien.
- No insistir nunca en saber el apellido de una persona, ya que mucha gente prefiere no decirlo.
